Hace unos días me encontre diciendo «Me arrepiento de esta decisión que tomé», fue entonces cuando me di cuenta que esa decisión ya formaba parte del pasado, que no podía arreglarla, que solo podía sanar las memorias que me hicieron tomarla y liberar la energía bloqueada que hacía que no me sintiera bien con ella.
Como solo me afectaba a mí, no sentía culpa, pero en general, cuando nuestras decisiones afectan la vida de otras personas, no solo nos sentimos mal, sino que la culpa nos acompaña.
Entonces me di cuenta que muchas veces permitimos que el «arrepentiemiento» por decisiones que tomamos en el pasado nos invada, sin comprender que seguramente en ese momento «hicimos lo que pudimos» quizas hasta como en mi caso, pensando que era lo mejor y con el tiempo nos damos cuenta que no fue así.
Pero lo peor es que sentirnos así, no nos permite ver las posibilidades que tenemos en el presente, que más allá de «Si hubiera hecho otra cosa» los seres humanos somos el resultado de las decisiones que tomamos cada día y que tenemos que aprender de las que nos parecen erradas, para no volver a equivocarnos.
Tenemos que darnos permiso para equivocarnos, porque equivocarse y aprender, es crecer, es parte de nuestro proceso y perdonarnos por esas decisiones erradas tambien es amarnos cada día un poco más.
Avanzar es aprender de nuestras equivocaciones, dejar atrás la culpa y regalarnos la posibildiad de hacerlo bien la próxima vez, porque cada día nos enfrenta a nuevas decisiones a tomar y seguramente cada día lo vamos a hacer mejor.
Le pido a mi divinidad que sane las memorias que compartimos y que nos hicieron tomar decisiones equivocadas en el pasado. Lo siento, gracias, te amo.
Que tu camino sea cada día más lleno de luz y bendiciones
Andrea Bruno
Coach